Antonio Domínguez de Haro nació el 14 de Mayo de 1928 en Granada, en la maravillosa costa tropical de Almuñécar en España. A la temprana edad de 16 años , presenta su primera exposición en España con sesenta y seis obras expresando su interés en el paisaje submarino. La exposición no solamente obtuvo reconocimiento inmediato de los medios de Comunicación, sino que también los críticos de arte aplaudieron con entusiasmo el trabajo del artista anticipando el futuro éxito de la joven estrella.
Después de este éxito, Domínguez de Haro dedicó su vida a su pasión… pintar y contemplar los mares.
Domínguez de Haro se dedicó a bucear para poder investigar a fondo los mares y de esa manera, poder apreciar y capturar la belleza de los paisajes submarinos. Su obra de arte presenta extraordinarias imágenes de un mundo de ensueño, de belleza y poesía, donde sus elementos se muestran con extraordinarias decoraciones de color y forma que fácilmente atrapan la atención del espectador. Se trata de un Nuevo mundo que era prácticamente desconocido para el público. Es el mundo orgánico que se encuentra en el fondo de los mares y que Domínguez de Haro quiso plasmar en sus lienzos. Así, revelando los misterios de los mares, al mismo tiempo que apoyando su creencia en la importancia que tuvieron los mares para el comienzo de nuestra existencia y para nuestras vidas actuales.
Cada una de sus exposiciones fueron elogiadas por los medios de comunicación y sus seguidores intelectuales del mundo del arte. Decían que sus obras eran de una gran belleza y que tenían el encanto de una rima poética.
Domínguez de Haro pasó gran parte de su tiempo viajando por el viejo continente de Europa con el fin de aprender y actualizarse a sí mismo con las últimas tendencias artísticas. Aprender las últimas técnicas, así como explorar las profundidades de los mares…fue clave para que Domínguez de Haro llevara a cabo su misión de hacer el mar parte de nuestra vida diaria y con un fuerte deseo de hacernos conscientes de la importancia de la existencia de los mares, para así admirarlos y protegerlos…ya que les debemos el respeto y admiración por ser la fuente de energía de donde venimos.
Domínguez el Haro se considera un ciudadano del Universo. Es un hombre de auténtica espiritualidad, rico en compasión y sensibilidad y que es valiente, y aventurero.
Tiene su estudio en Almuñécar y una exposición permanente de su obra en Granada.
Hoy en día, Domínguez de Haro captura la vida en los mares sumergiéndose en lo más profundo de su alma donde mantiene vivo cada uno de los momentos que pasó en toda su vida sumergiéndose en los fondos marinos.
Cada una de sus obras lleva un mensaje de conservación fuerte y también su preocupación por el futuro de nuestro planeta potencialmente en peligro de ser devastado por la contaminación. Alcanzando un periodo de iluminación, Domínguez de Haro decidió dedicar cada uno de sus pensamientos y acciones para la conservación del océano. Y desarrolló su capacidad de conexión con el universo para comprender que los océanos no están separados sino conectados para formar un solo gran océano.
Domínguez de Haro es considerado al pionero de las pinturas submarinas y el arte orgánico. Su sensibilidad y su técnica para poner a flote los colores, y la vida del mar, son insuperables y únicas. Nadie mas que el, ha dedicado tantos años para traer la belleza y la majestuosidad del océano a un lienzo, y por lo tanto a nuestras vidas. Su trabajo ha enriquecido las artes plásticas.